Sábado 24 de septiembre de 2022
Descripción de la ruta:
Para
realizar esta ruta nos desplazamos hasta el apeadero de Camorritos en
Cercedilla, desde aquí y una vez preparados empezamos el recorrido hacia el
norte por una calle que coincide con el sendero GR-10, pasamos una puerta
metálica y el sendero va girando hacia la izquierda, transitamos por un bonito
pinar en la zona denominada La Teja. Llegamos a un cruce de pistas donde
encontramos un montón de piedras y una enorme roca de granito, aquí cogemos la
Senda del Sevillano con clara tendencia hacia el norte , vamos ganando altura y
el bosque se abre ofreciéndonos unas preciosas vistas de la sierra y de los
pueblos serranos, enseguida llegamos al mirador dedicado al poeta Luis Rosales,
es un promontorio rocoso con amplias vistas al valle, cerca está el vértice
geodésico Julián de Blas, y siguiendo mas al norte encontramos el mirador
dedicado a Vicente Aleixandre, este con unas pasarelas de madera en una gran
roca, desde aquí las vistas de los Siete Picos son impresionantes y tomamos
contacto con la pista llamada Carretera de la Republica por donde caminamos un
rato, llegamos a un cruce de caminos donde vemos un banco de madera indicativo
de la Senda Herreros, pero nosotros continuamos por la Senda de los Alevines en
dirección al Pico Majalasna, el de menos altitud de los Siete, por el camino
encontramos el curioso Reloj Solar de Cela, más arriba un dibujo de un buitre
grabado en la roca, pasamos por la Pradera de Majalasna y llegamos a la base
del pico, una entretenida trepada por grandes bloque y estamos en la cumbre,
con impresionantes vistas en 360º, como arriba hace un buen viento del norte
enseguida bajamos por el mismo sitio, ya abajo continuamos hacia el este por el
Cóncavo de Siete Picos buscando el camino de la Pata de Cabra, el sendero no está
claro y hay pocos hitos, una vez en el camino continuamos hacia el sur,
encontramos otro curioso mirador llamado Rocas de Laín, donde aparte de
inscripciones en las rocas vemos otro dibujo grabado , esta vez es un dragón,
aprovechamos el buen sitio para parar a comer.
Después de
reponer fuerzas continuamos camino hacia el sur y llegamos de nuevo al cruce
donde vimos el Banco Herreros, desde aquí prácticamente volvemos por el mismo
camino hasta el apeadero donde tenemos el coche aparcado