Sábado 22 de Abril de 2023
Descripción de la ruta:
Empezamos esta ruta en el
aparcamiento de la zona recreativa La Panera, perteneciente al pueblo de El
Espinar en la provincia de Segovia, continuamos andando en la misma dirección,
siguiendo la carretera hasta que cruzamos por un puentecillo que salva el cauce
del rio Moros. La carretera hace una curva pronunciada hacia la izda., pero
debemos seguir por la dcha. hasta un paso canadiense, lo cruzamos y justo a la
izda. debemos empezar a subir por la ladera, un pequeño sendero nos conduce
hacia el GR88, que un poco más adelante se convierte en La Cañada Real Leonesa,
camino amplio, limpio y en constante subida hasta el Puerto de Pasapán. Camino
que parece no acabar nunca, unas veces muy cómodo, pero otras con grandes
pendientes, que durante casi 6 Km nos acerca al puerto, en un cierto punto,
marcado con hito, debemos abandonar la pista para subir un trecho muy abrupto y
poco marcado, para llegar al puerto. Desde el Puerto de Pasapán, ya con amplias
vista de la llanura segoviana y en primer término de la capital, también
divisamos hacia la dcha. el sendero que nos llevara hasta muestro destino, Peña
El Oso. Aquí abandonamos el GR88 que continua hacia tierras segovianas, y
tomamos el PR4 que transcurre por la cuerda, hasta el Puerto de la Fuenfria,
empezamos a subir hacia el Pico de Pasapán, una vez culminado bajamos hacia el
siguiente collado, para seguir subiendo hacia La Peña El Oso, pasando antes por
la Peña de la Apretura. Una vez en la cima, tenemos una buena vista de La
Pinareja, Montón de Trigo, Peña Águila, La Peñota, y un poco más lejos toda la
zona de La Bola del Mundo, también una vista espectacular del Valle del rio
Moros, con sus frondosos pinares y los dos pequeños embalses que guardan sus
aguas, aunque a ratos las nubes cubren todo, el viento hace que se despeje
enseguida, después de tomar las obligatorias fotografías de tan bonitos lugares
volvemos por nuestros pasos y comenzamos la abajada hasta el primer collado,
desde donde bajaremos hacia el valle por donde podamos, pero antes buscamos un
buen lugar para comer al resguardo del viento. Después de reponer fuerzas y un
pequeño descanso emprendemos la marcha, lenta y larga bajada por la ladera, claramente
atrochando y sabiendo que mas abajo esta la pista, vamos viendo que el mejor
camino para evitar la tupida vegetación es bajar por la pedrera, poniendo
especial cuidado con las piedras sueltas, muy recomendable usar palos en esta
travesía por la rocas, para aprovechar todos los apoyos posibles, incluso usar
las manos para evitar riesgos, ya que una caída aquí seguro que trae malas
consecuencias.
Poco a poco nos vamos acercando al bosque,
aunque aquí no acaban los problemas, nos encontramos un pinar en terrazas,
arboles muy juntos que hacen difícil caminar entre ellos y desnivel entre las
terrazas con terreno bastante vertical y suelto, vamos buscando los mejores
pasos y por fin conectamos con una pequeña y poco transitada pista.
La pista al inicio están cubierta de hierba lo
que hace bastante cómodo caminar por ella, de momento seguimos bajando rectos
hacia el fondo del valle, hasta que encontramos la pista buena, seguimos por la
izquierda hasta que encontramos la pista que va por los embalses, después de
una curva pronunciada y cambio de dirección llegamos hasta el Embalse del
Espinar, repleto de agua y soltando por los aliviaderos todo lo que sigue
recogiendo, seguimos pista hasta el siguiente embalse, este con más capacidad y
denominado Embalse del Tejo, bonita estampa desde el dique, formada por la gran
superficie de agua entre este bonito pinar con los picos montañosos al fondo.
Después del embalse continuamos andando ya un
poco hartos de pista, son bastantes kilómetros de ruta y nuestros pies y
espaldas se resienten, aunque ya sabiendo que nos queda poco para llegar al
aparcamiento, una vez en este, unos buenos estiramientos y de vuelta para casa después
de un rutón importante, casi 24 km y mas de 1000 metros de desnivel